Hace unos días pedí a Dios y al Universo que me pudieran ayudar a darme algunas señales para saber qué hacer con mi trabajo actual. Desde hace un poco más de un año, tenía la idea de dejar mi empleo, ya que no me hace feliz, no me siento conectada y no siento que vivo el tiempo de mi vida que paso en el trabajo con amor y entusiasmo.
El día de ayer, al escuchar una conversación de dos personas en un podcast, una de ellas le obsequió a la otra persona una pluma de ave y seguido de esto le dijo que había algo que a é mismo le costaba mucho y que en cambio a él le admiraba mucho y eso era su manera de FLUIR con la vida. La otra persona le respondió «Si no te dejas fluir es porque no te quieres a ti mismo, porque te importa más tu trabajo que escucharte a ti mismo».
Escuchar esas palabras me llegaron al corazón y las percibí como una de las señales que había pedido, pues me sentía identificada con el hecho de darle más importancia al trabajo que a mis sentimientos y emociones.
LAS EMOCIONES EN MI CUERPO
Por otra parte, en cuanto a mi salud física, desde hace aproximadamente el mismo tiempo, las uñas de los dedos pulgares de mis pies me han lastimado mucho, y hay días que es tanto el dolor y la presión que siento, que me impiden caminar bien.
La misma noche de ayer, solamente de estar acostada sentí mucho dolor, y comencé a pensar y a analizar, como es que las emociones afectan nuestra salud. En este caso sentía que mis pies me decían que sienten mucha presión y que no pueden avanzar y se me vino a la mente mi situación en cuanto a mi decisión de dejar mi empleo.
Estoy sorprendida como es que nuestro mismo cuerpo nos dice cuando algo no va bien, cuando nos dice que debemos cambiar o actuar diferente y como es que a veces ignoramos sus mensajes, no lo escuchamos y nuestra salud empeora.
Gracias a esto, mis pies me han ayudado a conocerme mejor y a darme cuenta de que he sido una persona a la que le cuesta tomar decisiones, pienso mucho o demasiado en los detalles. Me da miedo el futuro, lo desconocido y el error. Me da miedo también que mis decisiones disgusten a alguien que amo.
Estos días de pensar tanto en esta decisión, de mucho análisis y lectura, llegué a darme cuenta de que:
CARLOS SOSA – FENG SHUI Y ASTROLOGÍA TRADICIONAL
Pedí algunas señales a Dios y al Universo y estoy feliz y agradecida por haberlas recibido y entendido, pero sobre todo estoy muy agradecida por el aprendizaje que esta situación está enseñándome en mi vida.
Ahora quiero empezar a intentar a ser más valiente y empezar a hacer caso a mi intuición. La vida no nos espera pues no es eterna y ahora quiero aprender disfrutando y ser yo quien decida vivir mi mejor vida.